Hey hey, espero todo marche bien, este ultimo mes ha sido de muchos cambios y dificultades en mi vida; lo que no me ha permitido postear con la regularidad en la que lo hago.
No siempre ha sido por falta de tiempo sino también por falta de ganas. No había querido hablar de esto porque son tantos los relatos de venezolanos en el extranjero que uno lee en las redes que ya después del relato 32, no me motivaba sino que me sentía triste, por eso me contuve de contar detalles de mi partida.
Como algunos saben me fui a Bogotá a probar suerte, elegí este país porque tengo familia allá. Al irme, me fui como todos los venezolanos que se van, con una ensalada de emociones en el interior: estas triste por dejar a tu gente atrás, estas feliz porque al fin podrás trabajar por tus sueños en un país donde la ausencia de papel sanitario no es un problema, estas nervioso porque caminarás por calles que jamas habías transitado, te sientes vulnerable y fuerte a la vez. Sientes que estas logrando una meta, que la situación del país te obligo a colocarte...irte del país.
Cuando llegué allá me encontré con una ciudad hermosa, grande, con un clima agradable, donde los servicios de la luz y el agua funcionan a diario (daba gracias a Dios por eso al levantarme cada mañana). Enseguida comencé a buscar empleo por los portales de trabajo en internet y en 3 días ya me estaban llamando a entrevistas.
En mi estancia en esta ciudad (un mes para ser precisos) tuve 6 entrevistas, en las cuales me decían que encajaba con el perfil solicitado, pero cuando se daban cuenta de que era venezolano me decían que no podían ayudarme con la visa de trabajo; pues necesitas de un contrato con una empresa para luego llevarlo a la cancillería y solicitar la visa de trabajo tipo 4. Tuve la misma respuesta en todos lados, mientras escuchaba a la gente decirme que eso se debía a las malas relaciones de nuestro país con Colombia.
Luego de 18 días sin empleo ya me estaba desesperando, pues estar todo el día encerrado solo me hacia pensar en mi familia, en mi mascota, en mis amigos y esto me ponía más triste de lo que estaba por la ausencia de trabajo. Un día hablé con mi papá y me dijo que me devolviera para gestionar la nacionalidad de mi mamá que es colombiana y que el me ayudaba a volver a salir del país, lo cual represento para mi una esperanza, a parte que anhelaba un abrazo de mi familia, ese abrazo que había sido incondicional cada vez que tenia un mal día o que las cosas no salían como lo planeaba.
Entonces decidí regresare y no llevaba ni un día acá cuando empece a ver a mi mama preocupada porque no había agua en el tanque. Porque no sabia que comprar de comida, y todos esas mortificaciones que solo los venezolanos tienen.
Ahorita me encuentro en "stand by" por los papeles de mi mamá los cuales tardan como un año en gestionarse. A la vez siento tristeza de ver como en otros países la vida es tan distinta, y ya lo digo porque lo viví, no porque me lo contaron. Lo que se esta viviendo aquí es para fuertes, por eso debemos serlo.
El fin de semana pasado no quise salir de mi cama (la extrañé mucho) me sentía atrapado en este país, triste y sin esperanzas; no puedo estar allá pero tampoco acá. Hasta que me di cuenta que esa actitud no es la que me llevara al éxito.
Todavía hoy miércoles, me encuentro luchando un poco contra la tristeza. Y para ello debo pensar que puedo hacer lo que me gusta aquí o en la China, así no tengas la proyección que podrías tener en otros países, hazlo, pues es tu pasión y producirá la misma sensación en ti si lo haces aquí o si lo haces allá.
Ahorita mi futuro es incierto, y si el tuyo también pues vamos a disfrutar cada cosa que hagamos en el hoy, ya que si vivimos con temor del mañana estaríamos dejando de vivir.
No te compares con los demás, si a ellos les fue bien en el exterior y a ti no, si a ellos todo se les dio fácil, pues alégrate por ellos pero no envidies, pues no sabes cuanto les habrá costado a ellos alcanzar sus metas. Enfócate en lo tuyo, respira, muévete; pero no te quedes sentado viendo la vida pasar y quejándote del Gobierno, pues eso no te llevará a ningún lado. Demos animo los unos a los otros para así hacer menos pesada la carga. Somos un equipo y estamos en esto juntos. Si te sientes un poco triste o estancado, llégame por las redes sociales, estoy dispuesto a escucharte y a que juntos trabajemos por salir adelante.
BTW En estos días llegué a mil seguidores en instagram, y quería aprovechar la oportunidad para agradecer a todos y cada uno por sus follows. Les prometo que pronto estaré posteando nuevas cosas.